jueves, 6 de enero de 2011

L: Aunque, claro, no todo era perfecto. Mientras hablabamos me dijo que él no tenía novia y yo me dije: “Ah, esto es cosa de mismisimo Destino” pero enseguida me sentí una zorra porque era porque su anterior novia, a la que amaba con locura, se había muerto de leucemia.

R: Leucemia… Parece una peli mala ¿no? Quiero decir, yo aún barajo que se lo inventase todo para ligar.

L: Y por eso no podía amar a nadie más. Fue un duro golpe para él, pobrecillo. Así que me conformé con ser solo su amiga durante tres años. Le apoyaba y le ayudaba a conseguir chicas. Pero él no las quería de verdad, eh aclaracón apresurada Él seguía queriendo a su novia muerta, iba a visitarla al cementerio y esas cosas, le llevaba rosas… O sea, que Javi no quería a ninguna de esas, me quería a mi… como amiga. Bueno, y a su novia muerta, claro.

R: Ya lo oireis, parece un culebrón sudamericano. Ni los de crepus-culo lo habrían hecho mejor.

L: Yo estaba muy, muy triste así que decidí que lo mejor sería irme lejos de él, por mucho que sintiera mi corazón desgarrarse. Así que supliqué a mis padres que me enviaran con mi tía de Londres. Y el día que nos despedimos, después de tres años, cuando estábamos en el cementerio solos, noto que está raro ¿vale? Le pregunto qué le pasa y se pone a sollozar y me dice que me quiere ¡Que me quiere! Que feliz me puse. Me dijo que me quiso desde la primera vez que me vio pero que no había podido olvidar a Sara hasta ese momento… Y nos besamos ahí, en el cementerio. Fue taaaaan bonito…

R: Jo, es que fuero tes años. TRES AÑOS Levanta los dedos, indicandolo Desde los trece hasta los dieciséis. Si para ella es romanticismo, para mi es una ENFERMEDAD MENTAL.

L: Ay, y me dijo tantas cosas bonitas. Hizo tantas cosas por mi, conmigo… Una vez me despertó cantando una serenata bajo mi ventana. Nos prometimos que nunca nos separariamos y, jolín, después de lo que hemos pasado juntos… Nunca, nunca vamos a dejarnos el uno al otro sonrisa cándida y encantadora

R: Además, javier es un capullo. Un verdadero capullo. No sé que tal les irá ahora pero es que tenía pinta de imbecil profesional. Un día más en el poder y ese idiota habría ido despellejado a las minas de sal pompa indulgente de chicle

L: ¿Que qué tal ahora? Bueno… pausa y ojos bajos O sea, es normal que tenga amigas¿no? Muy normal. Normalísimo. Yo también… bueno, yo no tengo amigos. Amigas sí, a puñados, pero amigos no muchos… bueno, claro, las chicas tenemos un no-sé-qué que no tienen los tíos, sí, es eso. Después de un año de relación, eso es lo que pasa.

R: Un cabrón. A picar piedras lo ponía yo, ya verías cómo deja de perseguir rubias tontas por ahí… Ay, si yo no hubiera sido tan sumamente imbecil… mira a la periodista, dirigiéndose a ella ¿Sabes por qué no estás en una mina, construyendome una mansión o esclavizada de alguna otra manera? Porque fui tan jodidamente gilipollas que me olvido de las cosas más sencillas, por eso.

L: Ah, no, Rober no delira. Esperad, debo tener por aquí ,los recortes… se levanta

R: muy seria Soy un monumento a la idiotez suprema

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